en obras...

#1

Se dio cuenta justo en el momento en el que se disponía a analizar su vida. ¿Cómo no se había dado cuenta antes? Ya sabía el porqué de todo aquello que le estaba sucediendo. Ahora entendía, y cómo si entendía, cuál había sido siempre su fatal destino.

Cuando le preguntaron por su nombre y sus apellidos, no supo responder. Quizás no le había echado tantas cuentas a poseer una identificación o quizás se conformaba con cualquier sobrenombre condicionado por su forma física o color... Esas no habían sido nunca preocupaciones. Él se consideró siempre más espiritual. Buscaba una felicidad constante y un destino claro, práctico y solidario. Tampoco se planteó qué pensarían de él los demás. Perseguía sus sueños y metía todo en juego para conseguirlo. Pero si solo se hubiese dado cuenta antes, no habría perdido tanto tiempo inútilmente en una búsqueda terminada antes del inicio. ¡Qué poca vista! ¿Sería posible que alguno de sus compañeros sabía lo que pasaba y nadie le dijo nada incluso viéndolo de aquella manera? ¡Qué falta de concentración, por Dios! Si hubiese tenido alguien para rendir cuentas se habría desmoralizado por completo.

[...]

Comentarios

Entradas populares